26/04/21

25 países podrían vencer la malaria en 2025

malaria
La entrega de mosquiteros tratados con insecticida para repeler al mosquito transmisor de la malaria (Anopheles) sufrió retrasos en muchos países debido a la pandemia. Crédito de la imagen: OPS/Flickr, bajo licencia Creative Commons 2.0

De un vistazo

  • La OMS enlistó a 25 países con posibilidades de eliminar el paludismo para 2025
  • Ocho países fueron certificados como libres de paludismo el año pasado a pesar de la COVID-19
  • Pero interrupciones de servicios sanitarios durante la pandemia podrían amenazar los avances

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La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma haber identificado 25 países con posibilidades de erradicar la malaria o paludismo en los próximos cinco años, a pesar de la carga añadida del COVID-19 y la resistencia a los medicamentos antimaláricos.

El grupo incluye a 17 países que, aunque no cumplieron el objetivo de eliminar la enfermedad para 2020, se unirán a la nueva iniciativa E-2025 y recibirán apoyo especializado y orientación técnica con el objetivo de eliminar la enfermedad para 2025.

Entre estos países se encuentran Guatemala, Honduras, Panamá y República Dominicana.

La OMS anunció la iniciativa el 21 de abril junto con la publicación del informe Zeroing in on malaria elimination, que traza el progreso de la iniciativa E-2020, lanzada en 2017 para ayudar a 21 países en sus esfuerzos por eliminar la malaria para 2020.

“No importa la carga de malaria que tengas en tu país, hay un camino que se puede recorrer y la última etapa de ese camino será la eliminación de la malaria”.

Pedro Alonso, director del Programa Mundial de Malaria de la OMS

Sólo el año pasado, ocho países informaron haber tenido cero casos autóctonos de paludismo, “un logro notable en vista de la pandemia mundial de COVID-19 en curso”, dice el informe.

Veinticuatro países habían interrumpido la transmisión del paludismo durante tres años o más a finales de 2020, de los cuales 11 fueron certificados como libres de paludismo, según el informe. De los 87 países con paludismo, 46 reportaron menos de 10.000 casos en 2019, en comparación con 26 países en 2000.

En un discurso previo al Día Mundial del Paludismo, que se celebró el 25 de abril, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo: “Muchos de los países a los que hoy rendimos homenaje soportaron, en su momento, una carga muy elevada de paludismo. Sus éxitos fueron logrados con mucho esfuerzo y se produjeron sólo tras décadas de acción concertada. Juntos, han demostrado al mundo que la eliminación del paludismo es un objetivo viable para todos los países”.

La OMS advierte, sin embargo, que los servicios sanitarios esenciales, incluyendo los del paludismo, deben mantenerse si se quiere seguir avanzando.

Aproximadamente un tercio de los países de todo el mundo informaron de interrupciones en los servicios de prevención, diagnóstico y tratamiento del paludismo durante el primer trimestre de 2021, según una encuesta de la organización, mientras que las cuarentenas y las restricciones a la circulación causadas por la pandemia provocaron retrasos en la entrega de mosquiteros tratados con insecticida y en las campañas de fumigación de interiores con insecticida.

Los avances más destacados se produjeron en la región del Gran Mekong, en el sudeste asiático, donde el número de casos de malaria registrados en seis países se redujo en un 97 por ciento entre 2000 y 2020.

En América Latina, El Salvador se convirtió en el primer país de la región en eliminar la enfermedad al ser declarado libre de paludismo por la OMS a principios de este año. En 1965 este país había registrado el mayor número de casos de paludismo en América Central (34.000 pacientes anuales).

Paraguay es el otro país de la región que registró cero casos de paludismo autóctono durante tres o más años. Este país recibió en 2018 la certificación de la OMS de eliminación de malaria en su territorio.

Por el contrario, Ecuador –con 1921 casos—, México (345 casos) y Surinam (148 casos) fueron los países de la región que más casos autóctonos o introducidos reportaron hasta fines de 2020, según el documento.

Los 25 países del grupo E-2025 que aún no han alcanzado este objetivo tendrán acceso a  herramientas, actividades y estrategias de orientación de la OMS, así como a foros y órganos consultivos mundiales.

“Esto incluye a virólogos experimentados, expertos en salud pública y políticos que apoyan a los países en la identificación de los cuellos de botella para recorrer la última milla y resolverlos”, dijo Pedro Alonso, director del Programa Mundial de Malaria de la OMS durante una conferencia de prensa virtual el 20 de abril.

De cara al nuevo objetivo quinquenal, el informe E-2020 identifica los factores comunes de éxito hacia la eliminación. Entre ellos se encuentran el compromiso político, la financiación sostenida, los sistemas sanitarios inclusivos, los datos de vigilancia y la participación de la comunidad.

“La respuesta ha sido asumida por estos países y, en general, la financian ellos mismos”, dijo Alonso, citando a Argelia como uno de los estudios de caso del informe.

Argelia se convirtió en el tercer país de África en ser certificado oficialmente libre de malaria en 2020, después de Mauricio (1973) y Marruecos (2010). Su programa de eliminación de la malaria se financió íntegramente con fondos nacionales.

“Si otros 25 países pueden confirmar que este es un camino viable que se puede recorrer, eso será una enorme fuente de inspiración para el resto de los países endémicos”, añadió Alonso.

La inspiración es un motivador fantástico, opina Jaishree Raman, principal científica médica del Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica y miembro del Comité Sudafricano de Eliminación de la Malaria. “Pero mantenerla es difícil cuando tienes constantes desafíos y falta de recursos”.

Con la carga adicional de COVID-19, Raman afirma que la financiación nacional es escasa para los programas de malaria. “Sin financiación, capacidad humana y apoyo en infraestructura, no se va a conseguir la eliminación en Sudáfrica ni en países similares”, subrayó.

Frente a estos obstáculos, Alonso afirma que la OMS pretende enviar un “mensaje de esperanza” de cara al Día Mundial de a Malaria.

“No importa la carga de malaria que tengas en tu país, hay un camino que se puede recorrer y la última etapa de ese camino será la eliminación de la malaria”, dijo.

> Enlace al informe Zeroing in on malaria elimination

Esta información fue publicada originalmente en el portal global de SciDev.Net y se le añadieron datos de América Latina.