Agricultura de la región se une a la acción climática

[MADRID]  Plataforma de Acción Climática en Agricultura (Placa) es el nombre elegido por un conjunto de países de América Latina y el Caribe para unificar distintos tipos de acciones agropecuarias que contribuyan a construir capacidades e identificar acciones que ayuden a la adaptación y resiliencia frente a los nuevos escenarios del cambio climático.
 
La iniciativa fue lanzada en la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático (COP25), que debería culminar hoy en esta ciudad, pero que probablemente se extienda hasta el fin de semana. Placa tiene la asistencia técnica de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), también de la ONU.
 
Su objetivo es generar y promover la colaboración de los países de la región para mejorar sus capacidades para la acción climática doméstica en el sector específico de la agricultura, que aporta el 45 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero de América Latina y el Caribe (incluyendo los cambios en el uso de la tierra).

“Está claro que una parte importante de las emisiones de América Latina provienen de la agricultura y cambios de uso de suelo. Me parece que Placa es una oportunidad porque es un espacio de cooperación al más alto nivel político”.

María del Pilar Bueno – Comité de Adaptación de la Secretaría de Cambio Climático e investigadora del Conicet Argentina.

 
El sector agrícola, y especialmente la ganadería, es clave en la lucha contra el cambio climático debido a que el ganado, sobre todo el vacuno, es fuente de un potente gas de efecto invernadero: el metano. Por eso en algunos foros se sugiere incluso cambiar la forma en que se alimentan las personas para mitigar los daños. 
 
Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL explicó que la acción climática en la agricultura se refiere a encontrar soluciones basadas en la naturaleza, la bioeconomía y la articulación con las agendas de las convenciones de diversidad biológica y de desertificación, además del diálogo ciencia – política. “Traer a Placa esos y otros temas emergentes es una tarea en la que también podemos apoyarles desde la Secretaría Técnica”, señaló durante el lanzamiento.

Hasta el momento, son once los países integrantes de Placa: Argentina, Bahamas, Brasil, Chile, Costa Rica, Guatemala, Perú, Uruguay, Ecuador, México y República Dominicana, pero hay más invitados que podrían sumarse. Entre ellos, Colombia, ya que será en Cali la reunión del próximo enero con el fin de diagramar detalles y alcances de Placa. 

En opinión del ministro de agricultura de Uruguay, Walter Oyhantcabal, algunas actividades que deberá abordar Placa serán el desarrollo de capacidades para monitorear si se avanza o no a sistemas más adaptados y sinergias para la mitigación; capacidades técnicas para mejores inventarios y para acceder a más inversión tecnológica, y para que haya proyectos de investigación de carácter regional.
 
“Estaríamos contentos si en los próximos tres o cuatro años la plataforma logra concretar algunas de esas propuestas”, señaló a SciDev.Net en la capital española,Además, Oyhantcabal señaló lo positivo de que las acciones en este sentido estén en manos de ministros de agricultura. “Normalmente las acciones de cambio climático son lideradas por ambiente o interior; pero nosotros pretendemos que, en forma ordenada, lo hagan los sectores productivos”, agregó.
 
Ana Cristina Quirós, viceministra de agricultura y ganadería de Costa Rica, se mostró muy orgullosa de formar parte de la plataforma. “Este es un sector obviamente clave para la seguridad alimentaria así como muy vulnerable al cambio climático”, dijo a SciDev.Net.
 
“Por eso es tan importante esta propuesta de colaboración conjunta para generar tecnología, intercambio de experiencias, capacitación y apoyo a la hora de transferir conocimientos”, agregó.
 
Quirós mencionó la relación entre este esfuerzo y la necesidad de cumplir con el Acuerdo de París, firmado en 2015. “Pero eso no nos debe hacer perder productividad, ni perder por ejemplo el conocimiento ancestral indígena, en armonía con el ambiente, algo que por nuestra parte nos gustaría también compartir con el resto de la región”, enfatizó Quirós.
 
“Está claro que una parte importante de las emisiones de América Latina provienen de la agricultura y cambios de uso de suelo. Me parece que Placa es una oportunidad porque es un espacio de cooperación al más alto nivel político”, dijo a SciDev.Net María del Pilar Bueno, copresidenta del comité de adaptación de la secretaría de cambio climático de la ONU e investigadora del Conicet argentino, que no participa de la plataforma.
 
“Hay que posicionar este tema en la agenda internacional, no solamente en nuestras obligaciones de reducción (de gases de efecto invernadero), que son claves y hay que asumirlas, sino desde las experiencias positivas. Por eso Placa sirve. América Latina tiene un potencial significativo para la cooperación que no lo ha explotado adecuadamente. Un ejemplo es el agrícola-ganadero”, concluyó Bueno.
 
* Esta información fue producida como parte del Programa Latinoamericano de Cobertura Periodística COP25.