27/01/10

Farming of giant maize made ‘cultural heritage’ in Peru

Selling maize in the Urubamba valley Copyright: Flickr/endless trail

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[LIMA] El gobierno peruano declaró ‘Patrimonio Cultural’ a los conocimientos asociados con el cultivo de una variedad de maíz blanco de grano gigante.

Esta declaración —la primera que se otorga en el país a los métodos de producción de un cultivo— significa que dichos conocimientos son considerados parte de la identidad y cultura del pueblo peruano y serán protegidos para las futuras generaciones.

Los conocimientos, tradiciones y tecnologías ancestrales relacionadas con el cultivo del maíz conocido como Paraqay Sara en lengua quechua, fueron declarados como patrimonio cultural de la nación por el Instituto Nacional de Cultura a comienzos de este mes (4 de enero).

Sin embargo, los especialistas discrepan acerca de si la designación tendrá alguna influencia sobre los derechos de propiedad intelectual del cultivo.

El cultivo ya está protegido. En 2005, el gobierno peruano otorgó una ‘denominación de origen’ a este maíz. Esta herramienta legal internacionalmente reconocida certifica que un producto es oriundo de una región en particular y producido usando métodos específicos.

El maíz blanco crece en un estrecho corredor de 70 kilómetros en el Urubamba o Valle Sagrado de los Incas en el suroriente del Perú y es producido solamente por 5.000 agricultores.

Rodomiro Ortiz, especialista en maíz y consultor del Centro Internacional de Mejoramiento del Maíz y del Trigo (CIMMYT), dijo que la declaración es importante tanto desde una perspectiva genética como humana.

“El trabajo de los agricultores que han mejorado esta variedad de maíz por siglos mediante conocimientos y tecnologías ancestrales ha hecho posible preservar el germoplasma único que posee”, afirmó.

Alejandro Argumedo, director de Andes, organización no gubernamental peruana, señaló a SciDev.Net que la declaración no tendrá ningún efecto legal sobre los derechos de propiedad intelectual de esta variedad, pues ya están debidamente cubiertos por otros documentos internacionales suscritos por el Estado peruano.

Argumedo añadió que aunque la decisión probablemente protegerá el nombre indígena del maíz, también se necesita un marco legal que beneficie a los agricultores tradicionales, proporcionándoles nuevos accesos al mercado, por ejemplo.

Ricardo Sevilla, especialista en maíz y consultor del Grupo Consultivo para la Investigación Agrícola Internacional (CGIAR por sus siglas en inglés), fue más escéptico. El reconocimiento de un conocimiento tradicional asociado a la producción de un cultivo como patrimonio nacional solamente es válido si el conocimiento es único y original, comentó a SciDev.Net. En su opinión, ninguna de esas condiciones se aplica a esta variedad.

Esta no es la primera vez que se protege un método de producción de cultivo. En 1995, la UNESCO declaró como Patrimonio Cultural Mundial a las terrazas de arroz del pueblo Ifugao en Filipinas