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La ampliación de las intervenciones contra la malaria debe estar acompañada de una mejor vigilancia, sistemas de salud más sólidos y apropiación local, dicen Laurence Slutsker y Robert D. Newman.

En muchos países africanos los progresos para mejorar el uso de mosquiteros tratados con insecticidas han sido limitados. Para lograr la meta del programa Roll Back Malaria (Hagamos Retroceder la Malaria) de proporcionar un mosquitero por cada dos personas en un hogar para el año 2010, se necesitarían distribuir 250-300 millones de nuevos mosquiteros.

Otras intervenciones también están muy retrasadas: el uso de combinaciones de artemisina en los niños febriles es inferior al seis por ciento en 14 países africanos.

Pero se han logrado algunos éxitos, dicen los autores. Siete de los países africanos proyectados para usar mosquiteros tratados con insecticidas superaron en 40 por ciento su uso en 2007, mientras que la financiación internacional para el control de la malaria se triplicó entre 2004-2007. El liderazgo mundial también ha mejorado desde 2006, lo que resulta en una mejor coordinación y una promoción más efectiva.

La apropiación y el compromiso nacionales son fundamentales para mantener el progreso, en opinión de los autores. El apoyo a la recopilación de datos sobre la carga de la malaria y la cobertura de las intervenciones mejorarán la toma de decisiones en el ámbito local y ayudarán a hacer más equitativa la disponibilidad de mosquiteros frente a las necesidades.

Enlace al artículo completo en The Lancet *

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