Por: Tesy De Biase
Enviar a un amigo
Los detalles proporcionados en esta página no serán usados para enviar correo electrónico no solicitado y no se venderán a terceros. Ver política de privacidad.
[BUENOS AIRES] Un método desarrollado por investigadores argentinos para medir en la leche materna la presencia de benznidazol —medicamento que combate el mal de Chagas— reveló que la concentración transferida es mínima y no implica riesgo de toxicidad para el bebé.
El hallazgo, considerado preliminar, implica que durante el puerperio las mujeres infectadas podrían recibir tratamiento, el que actualmente se suspende durante este período o se indica a la madre no amamantar, para evitar potenciales efectos tóxicos para el bebé.
Aunque se creía que había riesgo para el lactante, “esto no había sido evaluado hasta ahora, ya que no se habían desarrollado las técnicas de medición necesarias”, escribieron en Therapeutic Drug Monitoring (agosto) los investigadores de la Universidad Nacional de La Plata, la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires y el Servicio de Parasitología-Chagas del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, en Buenos Aires.
El método desarrollado permite separar los lípidos y proteínas de la leche, los que son sucesivamente filtrados y finalmente inyectados en un equipo que detecta y cuantifica la cantidad de droga presente en la muestra.
“Aunque los resultados obtenidos en este estudio son favorables, es preciso que sean confirmados por otras investigaciones”.
Cynthia Stillmann
Guido Mastrantonio, coautor del estudio, dice a SciDev.Net que es justamente en la etapa perinatal cuando un porcentaje de mujeres que viven en zonas endémicas de Chagas acceden a la atención médica. “Por eso, si se les pide que regresen para iniciar el tratamiento cuando terminen la lactancia, probablemente no lo hagan o regresen cuando la enfermedad ya se ha hecho incurable por sus efectos crónicos inhabilitantes”, advierte.
A partir de los resultados, el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y Médicos sin Fronteras en Paraguay ya comenzaron a administrar benznidazol a mujeres con Chagas en período de lactancia.
“Aunque los resultados obtenidos en este estudio son favorables, es preciso que sean confirmados por otras investigaciones para generalizar su aplicación”, aclara a SciDev.Net Cynthia Stillmann, coordinadora del Programa Nacional de Chagas del Ministerio de Salud argentino.
Si el procedimiento es aprobado por la comunidad científica, se espera que se modifiquen los protocolos del tratamiento y así toda madre infectada que amamante reciba benznidazol.
Considerando que en Argentina aproximadamente tres por ciento de las embarazadas tienen Chagas, se estima que anualmente 14.000 mujeres podrían beneficiarse con el tratamiento durante la lactancia.
Los mismos investigadores desarrollaron otro procedimiento, hoy en etapa experimental, para medir la concentración de benznidazol en sangre y orina, según publican en el Journal of Clinical Laboratory Analysis (13 septiembre).
“Actualmente no existe ningún estudio que permita medir si las dosis administradas son las adecuadas”, explica a SciDev.Net María Elena Marsón, coautora de ambos estudios. El método desarrollado permitirá monitorear en cada paciente —adulto o niño— las concentraciones de benznidazol en sangre y orina, para ajustar las dosis y evitar o reducir al máximo los efectos adversos del tratamiento.
Enlace al resumen del estudio en Therapeutic Drug Monitoring
Enlace al resumen del estudio en Journal of Clinical Laboratory Analysis
References
Referencias
Ther Drug Monit. 2013 Aug;35(4):522-6. doi: 10.1097/FTD.0b013e31828f5214.
Clin Lab Anal. 2013 Sep;27(5):384-90. doi: 10.1002/jcla.21615.