14/02/11

Pesquerías necesitan tecnologías satelitales

Los Sistemas de Información Geográfica (SIG) podrían hacer más sustentable la acuicultura marina Crédito de la imagen: Lisbeth Fog

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[BOGOTÁ] Los países pobres podrían compensar su gran demanda de pescado con la necesidad de proteger su biodiversidad y hacer que su sector pesquero sea sostenible adoptando un sinnúmero de nuevas tecnologías, de acuerdo con un informe presentado por la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO). 

El cultivo de peces y mariscos es el área de mayor crecimiento en la producción alimenticia que proviene de los animales, y representa casi la mitad del total de pescado suministrado para la alimentación, según The State of World Fisheries and Aquaculture 2010, publicado el mes pasado (31 de enero). 

Y el consumo de pescado está en su punto más alto, según el informe. 

Para asegurar que las pesquerías y la acuicultura continúen proveyendo una entrada para la subsistencia y las pesquerías de pequeña escala —así como proteína para miles de millones de personas— los países deben adoptar la Internet, los Sistemas de Información Geográfica (SIG) y la detección remota, dice el informe. La tecnología "ha llegado al punto de convertirse en un paso esencial para proveer un ambiente propicio para el desarrollo de la acuicultura marina". 

La capacidad de uso de los SIG —hardware y software para computadores, información y personal capacitado para recolectar, actualizar y analizar la información geográfica— se desarrolla en un capítulo del informe.
Los sensores remotos pueden proveer una enorme cantidad de información sobre temperatura, velocidad de las corrientes, altura de las olas y uso de los suelos y del agua, sin importar si se encuentran en satélites, dispositivos aéreos, terrestres o submarinos. 

"Las herramientas espaciales ofrecen la posibilidad de obtener, organizar, analizar e informar de manera objetiva y cuantitativa sobre los espacios asignados a usuarios e interesados", dijo James McDaid Kapetsky, especialista de la compañía Consultants in Fisheries and Aquaculture Sciences and Technologies, con sede en Estados Unidos. 

"Lo que promueve [el uso de estas tecnologías] es, fundamentalmente, la competencia por el espacio en las pesquerías y la acuicultura". 

El informe dice que los SIG están siendo usados ya en países en desarrollo desde Bangladesh a Camboya, y desde Colombia hasta Malawi, con el fin de monitorear el desarrollo de la acuicultura.
 
"El software no es costoso", dijo José Aguilar-Manjarrez, oficial de acuicultura del Departamento de Pesquerías y Acuicultura de la sede italiana de la FAO. "Existen muchos SIG y paquetes de software de detección remota a bajo precio, y además la nueva tendencia es el software libre y gratuito". 

Sin embargo, continuó, crear la infraestructura, capacitar al personal y recolectar, procesar y mantener la información son procesos costosos. 

Adicionalmente, algunos países en desarrollo tienen poco conocimiento de los principios y las metodologías asociadas con las herramientas espaciales de toma de decisiones en ciencias marinas. Existe la necesidad de que las organizaciones estrechen su colaboración y compartan la información. 

John Selvaraj, especialista en manejo de recurso pesquero de la Universidad Nacional de Colombia, hizo un llamado para que se promueva una mayor capacitación en SIG y en sensores remotos para estudiantes universitarios de pregrado y de postgrado. 

El informe cita el uso en Ecuador del Sistema de Alerta Epidemiológico y de Manejo Acuícola (SAEMA) para monitorear los niveles de producción de las granjas camaroneras del Golfo de Guayaquil. SAEMA usa información generada por el satélite Landsat 7 y varias tecnologías de multimedia para medir factores como el promedio mensual de la producción del estuario. 

Otro ejemplo es el Proyecto Chileno de Acuicultura, que ofrece información diaria sobre la temperatura superficial del océano, la transparencia de sus aguas y la cantidad de clorofila. Esta última, por ejemplo, permite a los pescadores intervenir cuando se enteran de que un florecimiento de algas dañino se ha multiplicado hasta el punto de amenazar sus fincas piscícolas. 

En Colombia, el Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (Invemar) implementa una herramienta llamada Geovisor que ayudará a que los pescadores localicen cardúmenes más eficientemente utilizando información satelital. 

Enlace al Informe de la FAO (en inglés)