22/01/14

Países en desarrollo también investigan en hidratos de gas

Methane hydrate collection_NOAA
Crédito de la imagen: NOAA Photo Library

De un vistazo

  • Hidratos de gas de profundos fondos marinos son mezcla sólida de hielo y metano
  • India ya está investigando su potencial de extracción para combustible
  • Pero su extracción es técnicamente difícil y podría resultar antieconómica

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China, India y América Latina exploran un potencial cambio en la cancha de los mercados globales de energía. Katia Moskvitch investiga.
 
Parecen trozos de hielo, pero arden cuando se acercan a una llama. Si se tocan, se siente una extraña sensación de quemadura. Este peculiar compuesto se llama hidrato de metano. No solo podría convertirse en la próxima fuente de bonanza energética del mundo, sino también permitiría que algunos países costeros en desarrollo hicieran a un lado el carbón y otras fuentes ‘sucias’ de energía.
 
El hidrato de metano —también conocido como ‘hielo inflamable’— es una mezcla de metano y agua congelada en trozos sólidos. Se forma cuando las bacterias que se alimentan de la materia orgánica en descomposición del fondo de los océanos fríos producen metano. Allí, la combinación del frío y la presión extrema puede bloquear el metano en una jaula cristalina de moléculas de agua congelada. El hidrato de metano se puede encontrar en el suelo congelado que alguna vez estuvo bajo el mar y en el fondo marino de aguas profundas a lo largo de la mayor parte de los márgenes continentales.
 
Los países en desarrollo están comenzando a interesarse en el tema. Para empezar, hay bastante de este gas extraño por allí, yaciendo potencialmente en aguas profundas frente a sus costas. El Servicio Geológico de los Estados Unidos estima que la cantidad de energía atrapada en los hidratos supera a todas las demás reservas combinadas de combustibles fósiles del mundo. Además, el hielo inflamable arde de forma mucho más limpia que los combustibles fósiles más sucios y puede generar energía de manera más ecológica.
 
Varios países en desarrollo están comenzando a investigar las posibilidades de aprovechamiento de los hidratos de metano, y eventualmente reemplazar su dependencia de las importaciones energéticas con las enormes cantidades de este combustible relativamente limpio. Cuando se queman, los hidratos de gas liberan mucho menos dióxido de carbono que el petróleo y el carbón, casi sin ceniza y sin mercurio.

 

Este mapa explica la investigación en curso de los hidratos de metano en cuatro países diferentes. Créditos: SciDev.Net.

Sin embargo, nadie está realmente seguro si la extracción de metano a partir de los hidratos de gas sea buena para el ambiente. Después de todo, el gas puede escaparse y el metano es el principal causante del calentamiento global.
 
Los países desarrollados, como era previsible, han hecho los mayores progresos en la evaluación de los hidratos de gas. Japón lleva la delantera, impulsado probablemente por su propia escasez de recursos naturales y su aversión a la energía nuclear tras el desastre de Fukushima. En marzo pasado, el país llevó a cabo con éxito una operación de perforación a escala industrial que extrajo hidratos de gas de un lugar ubicado a unos 50 kilómetros al sudeste de la principal isla japonesa. Canadá, China, Nueva Zelanda, Taiwán y los Estados Unidos han mostrado similar interés en desarrollar su capacidad de recolectar metano de los hidratos.
 
India a la vanguardia
 
Pero los países en desarrollo también están haciendo sus propios esfuerzos. En 2001, la India lanzó su Programa Nacional de Hidratos de Gas (NGHP por sus siglas en inglés), organización semi gubernamental encargada de investigar las reservas de hidratos de metano en las aguas nacionales.
 
Durante una expedición en 2006, los investigadores exploraron cuatro diferentes áreas mar afuera: la cuenca Kerala-Konkan, cerca de la costa oeste; la cuenca Krishna-Godavari y la cuenca Mahanadi, frente a la costa este; y el mar de Andaman. Se perforaron 39 pozos en 21 sitios confirmando la presencia de varios depósitos de hidratos.
 
De hecho, en 2012 el NGHP descubrió que los depósitos de hidratos de gas en alta mar de la India son colosales: casi 26 billones de metros cúbicos, según Krishna Vishwanath, geólogo jefe de esa entidad. Esto es suficiente para llenar aproximadamente mil millones de piscinas olímpicas.
 
El NGHP planea ahora una segunda expedición para determinar la estabilidad de los hidratos y evaluar la factibilidad de extraer metano de ellos. Será difícil porque el gas se expande a medida que es conducido desde un ambiente de alta presión en el fondo del mar hacia la superficie.
 
Si todo marcha bien, una tercera expedición tendrá la tarea de llevar a cabo la producción piloto en un ambiente de aguas profundas de la India, dice Vishwanath.
 
Es importante “aprovechar este recurso evasivo, que en gran medida sigue estando en etapa de investigación, tanto a nivel mundial como en la India”, indica.
 
América Latina está rezagada
 
Asia lidera el desarrollo de los hidratos de gas entre los países en desarrollo. África y América Latina están interesados pero han avanzado menos en sus investigaciones. Ha habido algunas en países como Brasil, Chile y Uruguay, pero aún están en sus etapas iniciales.
 
Juan Diaz-Naveas, oceanógrafo de la Pontifica Universidad Católica de Valparaíso, Chile, señala que por el momento simplemente no se cuenta con datos suficientes para juzgar si los hidratos de gas son importantes para su país.
 
“Podrían ser el próximo gran recurso energético de Chile, pero para estar realmente seguros se necesita información más detallada de los hidratos de gas que tenemos debajo de los márgenes continentales de Chile”, afirma.
 
Los depósitos de hidratos fueron ubicados frente a la costa occidental chilena por un crucero de investigación en 1998 usando sonar. Sin embargo, el gobierno chileno no tiene una posición clara sobre la importancia de este nuevo recurso, explica Diaz-Naveas. Hasta ahora no ha habido perforación a gran escala en la zona. En 2007, una expedición recolectó algunas muestras para estudio, pero fue como parte de un viaje de campo genérico liderado por académicos locales con financiamiento del gobierno, empresas petroleras y del Servicio Geológico de Chile, más que de una búsqueda específica de hidratos de gas.
 
“En mayo pasado, el Comité Minero del Senado del Congreso chileno me invitó junto a otras dos personas a dar una visión general sobre los hidratos de gas y las posibilidades de su explotación”, continúa Diaz-Naveas, y añade que posteriormente el Comité decidió solicitar al presidente de la república desarrollar un programa nacional para evaluar el potencial de los hidratos de gas de Chile. No ha habido una respuesta hasta el momento, aunque esto puede deberse a la reciente agitación política debido a la culminación del mandato del presidente Sebastián Piñera.
 
ANCAP, la Empresa Nacional de Petróleo de Uruguay, ha participado en algunas investigaciones limitadas de hidratos de gas y actividades de exploración en alta mar. Y aunque por el momento el país está enfocado en encontrar fuentes convencionales, según Juan Tomasini de ANCAP, “creemos en el potencial de los hidratos de gas en alta mar [de] Uruguay y en el importante papel que pueden tener en el futuro”.
 
Incertidumbre económica
 
Una razón del por qué los países en desarrollo dudan en invertir en la investigación de hidratos de gas es la incertidumbre sobre la viabilidad económica de este recurso.
 
Basel Asmar, analista de HIS Consulting, consultora de información con sede en Colorado, Estados Unidos, señala que con la tecnología de gas de esquisto causando que los precios del gas natural convencional caigan en picada, los hidratos deben actuar desde un punto de vista económico que les asegure una participación en el mercado mundial de energía.
 
“Todavía no tenemos toda la información sobre la productividad de los hidratos de metano”, reconoce Asmar. “No sabemos si podemos tener una producción sostenible, y si esta producción será técnicamente factible de ser usada durante más tiempo. Sencillamente no conocemos cuántos pozos necesitamos perforar para poder compensar el gas convencional”.
 
Ciertamente aún hay montones de ‘incógnitas conocidas’ pero por lo menos los hidratos de gas tienen el potencial de cambiar de lado la cancha de juego del sector energético. Si a la exploración le sigue la producción de gas, las repercusiones geopolíticas, económicas y ambientales serán enormes, y los países en desarrollo podrían asumir nuevas posiciones en el mapa global de la energía transformada.
 
La versión original de este artículo se publicó en la edición global de SciDev.Net