14/11/13

Pequeños estados insulares sin ciencia climática

CLimate change_pacific islands_UN
Crédito de la imagen: Flickr/United Nations Photo

Enviar a un amigo

Los detalles proporcionados en esta página no serán usados para enviar correo electrónico no solicitado y no se venderán a terceros. Ver política de privacidad.

[VARSOVIA] Los pequeños estados insulares, apenas una mancha en la extensa franja del Océano Pacífico, tienen una importancia mucho mayor en la comprensión del cambio climático global de lo que sus minúsculas poblaciones sugieren.  

Ese fue el mensaje dado hoy en Varsovia durante un evento paralelo de la 19° reunión anual de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático.

Los delegados de Fiyi y Samoa creen que sus países no reciben el apoyo que requieren para realizar vitales observaciones climáticas en la región.

“En términos del cambio climático, los océanos absorben hasta el 90 por ciento del calor, por lo que entender cómo se comportan es crucial para comprender cómo cambiará la atmósfera”, dice Neville Koop, consultor climatológico de la delegación de Samoa.

En términos de cambio climático, los océanos absorben hasta el 90 por ciento del calor, por lo que entender cómo se comportan es crucial para comprender cómo cambiará la atmósfera”.

Neville Koop, delegado de Samoa a la COP19

Considerando las grandes áreas marinas que cubren las naciones del Pacífico —Kiribati tiene 800 kilómetros cuadrados de atolones de coral repartidos en un área que mide la mitad de Europa— la escasa capacidad de observación de los estados insulares crea una gran brecha en el conjunto global de datos climáticos, asegura.

Mejores mediciones oceánicas y de gran altitud, así como indicadores más rudimentarios, como precipitaciones y presión atmosférica, son vitales para producir modelos climáticos más precisos, añade Koop.

Además, como ese es el lugar de nacimiento del sistema climático ENSO (El Niño/Southern Oscillation), que calienta periódicamente las aguas del Océano Pacífico, esta franja del océano influye en el clima de Asia, África y las Américas, por lo que se requieren observaciones precisas para predecir los cambios futuros, explica. 

Pero con poblaciones que generalmente ascienden a unas decenas de miles, los organismos meteorológicos de estos estados no pueden aspirar a cumplir solos estas tareas vitales, reconoce Koop.

Algunos gobiernos, como el del Reino Unido, ya trabajan en aumentar la capacidad de observación en el Pacífico, pero se necesita un esfuerzo concertado internacional para llenar totalmente los vacíos de información, añade.

Elizabeth Holland, representante de la delegación de Fiyi, concuerda con la idea de que es muy importante construir capacidades en la región, pero indica que la falta de financiamiento para las observaciones sistemáticas no es un problema solo del Pacífico.

“Es una realidad en todo el mundo, pero especialmente dura en los países en desarrollo”, comenta a SciDev.Net.