30/10/14

Violencia: intrínseca al desarrollo y sin solución visible

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Crédito de la imagen: Fernando Moleres / Panos

De un vistazo

  • Investigación sugiere enfoque innovador: violencia no es más un problema
  • Nuevas formas de violencia testimonian que se requiere diálogo exhaustivo para enfrentarla
  • Empoderar a comunidades locales puede reducir violencia urbana y tasas de criminalidad

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[RIO DE JANEIRO] La violencia en las ciudades del mundo no es más un problema que se pueda resolver, según una nueva investigación que exhorta a los formuladores de políticas a reconocer que la violencia urbana es parte integral del actual modelo de desarrollo más que un problema a erradicar.

Basándose en artículos de países como Afganistán, Brasil, Colombia, Chile, Haití, Sudáfrica y Sudán del Sur, la edición de octubre de Environment and Urbanization presenta un enfoque innovador para estudiar medidas para reducir, gestionar y responder a la violencia urbana, donde vive la mitad de la población mundial.

“En el siglo XXI, la violencia es parte de la estructura de desarrollo y no va a desaparecer; la violencia está allí para quedarse”, dice a SciDev.Net Carolina Moser, coeditora de la revista.

El antropólogo urbano del Centro de Investigación Urbana Mundial de la Universidad de Manchester, Reino Unido, explica que “hace veinte años, la violencia no se consideraba un problema; era un asunto patológico y criminal y no un tema de desarrollo”.

En la publicación, las pandillas juveniles son descritas en términos de políticas de identidad y resistencia en lugar de criminalidad, respecto a su exclusión del empoderamiento económico y el estigma que experimentan.

Este nuevo enfoque avanzado permite trabajar con la estructura de las pandillas, y no desmantelarlas, lo que conlleva a un manejo de la violencia en lugar de su reducción.

La experiencia que Brasil ha tenido con la transferencia de conocimientos Sur-Sur en el tratamiento de las pandillas de Haití a través de la ONG Viva Rio ha sido “notable”, dando poder a las comunidades locales en la reducción de los índices de violencia y criminalidad urbana, señala Moser.

“En el siglo XXI, la violencia es parte de la estructura de desarrollo y no va a desaparecer; la violencia está allí para quedarse”

Carolina Moser

“Se ha avanzado mucho al replantearse cómo trabajar con las pandillas en lugar de tratar de acabar con ellas. Brasil está aprovechando el conocimiento adquirido y transfiriéndolo a Haití con un sistema de incentivos. Es una forma innovadora de combinar la paz y la educación en un proceso de largo plazo adaptado a un contexto local”, argumenta.

En comparación a hace una década, la violencia ahora se ha trasladado del campo a los centros urbanos, y muchas ciudades como las de Medio Oriente son lugares de conflictos y guerra.

“Somos testigos de nuevas formas de violencia como los conflictos de polarización aguda que vemos a través de grafitis y palabras hostiles escritas en las calles”, afirma Yasser El-Gharabawy, director del Centro de Investigación y Asesoramiento Social Tanaow (Diversidad) de Doha, Qatar.

La investigación implementó supuestos ecológicos y demográficos y llegó a la conclusión de que los barrios pobres urbanos se consideran peligrosos especialmente debido a la remodelación del entorno, con la fundación de comunidades cerradas y otros símbolos que apoyan la exclusión y la creación de una ‘violencia infraestructural’, nuevo concepto que identifica la violencia asociada a la falta de infraestructura básica (como agua y caminos adecuados, etc.).

Gharabawy recomienda que la violencia causada por la marginación, el desempleo y la discriminación sea tratada mediante un diálogo exhaustivo y rompiendo tabúes.

“No debemos subestimar a quienquiera que rompa un tabú o se sale de la tradición. Sin sus efectos nunca conoceríamos la magnitud del problema o consideraríamos herramientas para actuar en consecuencia”, afirma Intsar El-saeed, director del Centro de Desarrollo y Derechos Humanos de El Cairo.

Cabe señalar que la Violencia de Género se cruza con otras formas de violencia cotidiana y con los conflictos armados, lo que obliga a las agencias locales e internacionales y las ONG a incluirla en sus agendas de desarrollo urbano.

“Creo realmente en soluciones que provienen de la gente, en los últimos años ha habido muchas iniciativas contra el acoso y campañas de concientización. En Egipto, por ejemplo, ello dio como resultado una legislación este año”, comenta El-saeed.

Moser concluye que es muy importante que la investigación vaya en línea con la promoción para que cause un verdadero impacto.

Enlace al artículo completo en Journal Environment and Urbanization

References

Este artículo es un trabajo conjunto entre la edición de SciDev.Net de Medio Oriente y Norte de África (MENA) con la de América Latina y el Caribe.