26/10/12

Descubren ‘sombrero’ de magma en Andes centrales

La formación de magma semeja un sombrero mexicano bajo la superficie altiplánica. Los colores denotan temperatura. Crédito de la imagen: Scripps Institution of Oceanography

Enviar a un amigo

Los detalles proporcionados en esta página no serán usados para enviar correo electrónico no solicitado y no se venderán a terceros. Ver política de privacidad.

[LIMA] En el altiplano de los Andes centrales se encuentra el cuerpo activo de magma más grande de la corteza terrestre. Fue descubierto por un equipo de investigadores de Estados Unidos y Canadá.

La formación de roca semifundida semeja un sombrero mexicano gigante y se ubica en la frontera entre Argentina, Bolivia y Chile. Podría servir para entender mejor el nacimiento de los grandes volcanes, de acuerdo a la investigación publicada en Science (12 de octubre).

Los científicos usaron modelos informáticos para analizar datos satelitales y sísmicos de la superficie de la región de los últimos 20 años, comprobando que el magma se dilata formando una inmensa esfera flotante en medio de la corteza. Esta dilatación se conoce técnicamente como ‘diapiro’.

Según los autores —del Instituto Scripps de Oceanografía de la Universidad de California en San Diego (UCSD), EE.UU., y del Servicio Geológico de Alberta, Canadá— el diapiro hizo que la superficie se elevara a una tasa casi constante de aproximadamente 10 mm (0,4 pulgadas) anuales durante el periodo analizado. Es la primera vez que se identifica un diapiro de magma activo ascendiendo a través de la corteza terrestre.

La formación se halla en una zona de aproximadamente 289 km de ancho, tiene 1.005,84 metros de grosor y yace a 17,6 km debajo del altiplano. Comparte algunas similitudes con el cuerpo de magma de Socorro, Nuevo México, aunque el andino es más grande y su superficie se eleva cinco veces más rápido, dijo a SciDev.Net Yuri Fialko, autor principal y profesor de geofísica de la UCSD.

Según Fialko, este hallazgo mejorará el conocimiento sobre cómo se transporta el magma a través de la corteza terrestre y, en última instancia, sobre cómo se formó esta corteza.

“En los años venideros será importante proseguir el monitoreo de la deformación para ver si continúa el levantamiento y caracterizar mejor su forma y magnitud”, añadió, descartando el riesgo de una erupción inminente.

“El monitoreo continuo de la deformación y la sismicidad serán importantes para entender mejor este fenómeno y los riesgos asociados en el futuro”, precisó.

Andrew Lockhart, geofísico del Programa de Ayuda en Desastres Volcánicos (VDAP), dijo que el descubrimiento “es genial”.

“Nos muestra un aspecto a largo plazo de los procesos volcánicos que puede ser importante para la vigilancia de volcanes y la reducción de futuros riesgos. También resalta el valor de repetir desde diferentes ángulos las ‘miradas’ a los datos satelitales para ayudar a definir la frecuencia, volumen y forma de las intrusiones del magma”, comentó a SciDev.Net.

Sin embargo, opinó que este y otros estudios probablemente no influirán en los pronósticos volcánicos a corto plazo, ni en el altiplano andino ni en otras áreas.

Alberto Tomás Caselli, experto en volcanes del Grupo de Estudio y Seguimiento de Volcanes Activos de Argentina, dijo que la investigación “puede arrojar buenos resultados acerca del mecanismo eruptivo de volcanes de la Puna, donde coexisten con grandes calderas volcánicas”.

“A partir de estos resultados es importante validar la deformación con instrumentos de superficie (GPS, inclinómetros, etc.). También, tratar de investigar la geoquímica de fluidos volcánicos como gases fumarólicos y aguas, y la sismicidad local. Combinar varias técnicas permite obtener un modelo conceptual del comportamiento del sistema volcánico”, añadió.

Enlace al artículo completo en Science

Vea una animación del sombrero de magma hecha por Scripps:

References

Science 12 October 2012: Vol. 338 no. 6104 pp. 250-252