15/12/16

Carbón marrón reduce producción de ozono

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Crédito de la imagen: Cenusa Bioenergy, Iowa State University

De un vistazo

  • Se requieren más estudios sobre efectos de carbón marrón para la atmósfera terrestre
  • Su presencia cambia química de atmósfera y reduce producción de ozono, que protege de rayos UV
  • Pero como también absorbe rayos UV, puede disminuir incidencia de radiación

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[SÃO PAULO] El “carbón marrón”, una partícula orgánica muy pequeña producida por la quema de biomasa forestal en la cuenca amazónica, contribuye a disminuir la producción de ozono y agrava el calentamiento global, según un estudio publicado en la revista Scientific Reports.
 
La conclusión se basa en análisis de datos atmosféricos recogidos entre septiembre y octubre de 2007 en la ciudad de Santa Cruz, Bolivia. En ese período, la región soportó altas tasas de quema de biomasa, generalmente inducidas por las personas, en áreas deforestadas o convertidas en pasto.
 
El humo producido por las quemas contiene grandes cantidades de partículas finas que quedan suspendidas en la atmósfera. La mayoría refleja los rayos ultravioletas del sol, otras lo absorben.
 
Desde hace tiempo se sabe que las partículas de carbón negro absorben la luz solar en todas las longitudes de onda, calentando la atmósfera. El carbón orgánico —emitido también durante los incendios forestales— refleja la luz solar de vuelta, enfriando la atmósfera.
 
Sin embargo, el carbón marrón también absorbe la luz solar, pero a longitudes de ondas cortas. “Los modelos climáticos y fotoquímicos actuales no son capaces de inferir la cantidad de esas partículas en la atmósfera”, explicó a SciDev.Net la física Karla Longo, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), quien no participó en el estudio.
 
Los investigadores combinaron datos satelitales sobre la cantidad de partículas en la atmósfera con sus propiedades ópticas y verificaron que la quema de biomasa en tierras agrícolas y bosque amazónico generó grandes cantidades de carbón marrón en el periodo analizado.
 
Según simulaciones computacionales, ese carbón aportaría hasta 19 por ciento de todo el calor absorbido por la atmósfera terrestre.
 
Su presencia también cambió la química de la atmósfera, reduciendo la producción de ozono, que protege al planeta de los rayos ultravioleta (UV). Las propiedades ópticas observadas en el carbón marrón sugieren que redujo hasta en 18 por ciento la producción de ozono.
 
Para el físico Nickolay Krotkov, del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA y uno de los investigadores del estudio, los resultados señalan los peligros aún no totalmente comprendidos de las partículas producidas por la quema de biomasa para la salud humana y el ambiente.
 
“La mejor estrategia para contener los riesgos relacionados con esas partículas es reducir la quema de biomasa forestal en áreas agrícolas o en el bosque amazónico”, dice a SciDev.Net.
 
Según la física Márcia Yamasoe, del Instituto de Astronomía, Geofísica y Ciencias Atmosféricas de la Universidad de Sao Paulo (IAG-USP), el tema es paradójico y requiere revisar los modelos actuales que no son capaces de determinar la presencia de esa partícula en la atmósfera, y mejorar la comprensión de los investigadores sobre el carbón marrón.
 
Esa partícula disminuye la producción de ozono, contribuyendo a aumentar de la incidencia de los rayos UV en el planeta, pero como también los absorbe, puede disminuir la incidencia de la radiación UV. Al mismo tiempo, al retener esos rayos, contribuye a calentar el clima, sintetiza. 
 
Con la colaboración de María Elena Hurtado, de Chile.

Enlace al estudio completo en Scientific Reports