Por: Yojana Sharma
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Los principales riesgos para la seguridad alimentaria han ayudado con éxito a dar más importancia a la agricultura y la política alimentaria en la agenda internacional de desarrollo, según un informe del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI, por su sigla en inglés).
Sin embargo, de acuerdo con el Informe Global sobre Política Alimentaria 2011 del IFPRI —presentado ayer (23 de abril)—, aunque en 2011 no se registró el alza de precios de alimentos de 2008, la volatilidad de los precios permanece como un desafío constante, exacerbado por la inquietud y el conflicto, el aumento en la producción de biocombustibles a expensas de los alimentos, la degradación de la tierra y eventos climáticos extremos.
“En general, 2011 y los años inmediatamente anteriores han revelado graves deficiencias que enfrenta el sistema alimentario mundial”, señala el informe. “Problemas crónicos y a largo plazo, tales como la inseguridad alimentaria y nutricional también apuntan a las áreas donde el sistema de alimentación puede ser mejor”.
Para abordar todas estas cuestiones, los temas de la agricultura y la seguridad alimentaria deben ser prioritarios en la agenda mundial, señala el informe, añadiendo que “la demanda por investigación basada en la evidencia para informar sobre aquellas políticas es mayor que nunca”.
El informe detalla que los principales eventos de 2011 pueden brindar lecciones valiosas para informar a los legisladores en próximas actividades como la Conferencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible (Río+20) en junio en Brasil.
El documento cita estadísticas de la Base de Datos Internacional sobre Desastres sobre más de 200 desastres naturales que ocurrieron durante 2011, incluyendo la severa sequía provocada por temporadas de escasas lluvias consecutivas en el Cuerno de África.
“Promover la transformación social, económica y ecológica en la región podría construir resiliencia a esos choques y mitigar las tensiones de más largo aliento que también socavan el progreso en el Cuerno”, dijo Derek Heady, del IFPRI, quien fue el autor de la sección sobre desastres.
Lograr esta resiliencia requiere “innovación, experimentación y —algo no menor— compromiso político”, agregó.
Mirando hacia adelante, el informe dice que el mundo aún es vulnerable a los cambios de los precios de los alimentos porque las reservas de granos son extremadamente bajas y los granos básicos son exportados solo por unos pocos países.
“Sin una acción preventiva, varios puntos álgidos podrían irrumpir como crisis alimentarias en 2012”, advirtió el informe, señalando que al momento de ser elaborado los sistemas de alerta temprana apuntaban a un riesgo de sequía en la región africana del Sahel.
Aquellas predicciones se han hecho realidad, con condiciones de sequía que provocan una grave escasez de alimentos en ocho países del Sahel: Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania, Níger, Nigeria y Senegal, y partes de Camerún.
El director general del IFPRI Shengen Fan dijo: “Debemos encontrar nuevos caminos para explotar los vínculos entre agricultura y otros sectores, incluyendo la salud, la nutrición, el agua y la energía”, y pidió el establecimiento de un sistema mundial para medir, hacer un seguimiento y monitorear las interacciones entre esos sectores.
“Prestar atención a la igualdad de género [también] ayudará a hacer inversiones e intervenciones en esas áreas con más eficiencia”, agregó.
Las oportunidades para hacer eso en 2012 se producirán en la Cumbre del Grupo de los Ocho (G8), en mayo en Estados Unidos; la reunión del G20 en julio en Los Cabos, México; y en la cumbre Río+20 en junio.
Enlace al informe completo [7,9 MB]
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