Por: Helen Mendes
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[Curitiba, Brasil] Seis enfermedades no transmisibles han sido identificadas como prioritarias en los centros urbanos de Brasil, gracias a una herramienta que ayuda a asignar recursos de manera más eficiente en programas de prevención de enfermedades.
El modelo, denominado Índice de Salud Pública (ISP), puede ser aplicado en lugares cuyos sistemas de vigilancia de salud no son capaces de identificar sus prioridades mediante métodos tradicionales. Anteriormente, se usó en el estado de Missouri de EE.UU. e Italia.
Fue desarrollado por Eduardo Simões, director del Departamento de Gestión de Salud y Informática de la Facultad de Medicina de Universidad de Missouri.
“El modelo funciona mejor cuanto más datos e indicadores se tengan para facilitar el proceso de toma de decisiones”.
Eduardo Simões, Universidad de Missouri
Al aplicarse en Brasil otorgó alta prioridad a la atención de pacientes con hipertensión diagnosticada, inactividad física, control de presión arterial , hipercolesterolemia diagnosticada, tabaquismo y consumo excesivo de alcohol. Asimismo, otorgó un riesgo intermedio al sobrepeso y la obesidad.
La confiabilidad del modelo se relaciona con la disponibilidad y calidad de los datos epidemiológicos. "El modelo funciona mejor cuanto más datos e indicadores se tengan para facilitar el proceso de toma de decisiones", explica Simões a SciDev.Net.
"En Brasil, la vigilancia de la salud y la epidemiología es muy rica. Es tan buena o incluso mejor que muchos países desarrollados.", refiere.
El estudio, publicado en BMC Public Health, presenta una guía para la implementación de programas o para acelerar los ya existentes.
Uno de estos, en pleno funcionamiento en Brasil se llama “La Salud no tiene Precio”. Ofrece medicamentos gratuitos para el control de hipertensión, diabetes y asma.
"Este programa, sin duda, reducirá el impacto de estas enfermedades pues los pacientes son monitoreados para asegurar que los medicamentos controlen esas condiciones. Sin embargo, deben promoverse cambios de hábitos de salud y el manejo clínico de los niveles de colesterol con estatinas", advierte el artículo.
Bruce Duncan, profesor de la Escuela de Medicina de la Universidade Federal do Rio Grande do Sul (Brasil), señala que el artículo presenta datos de base importantes para una elección entre posibles respuestas del sistema de salud.
"Todos los países tienen que desarrollar estrategias para hacer frente a los retos de las enfermedades no transmisibles", dice Duncan a SciDev.Net. "El artículo debe estimular a otros en Brasil y otros países a desarrollar nuevos y mejores índices", agrega.
Según Duncan, uno de los puntos débiles de este índice "es que no ofrece una clara indicación de qué fracción de las intervenciones, y del presupuesto, debería asignarse a la población —por ejemplo, la construcción de espacios urbanos que fomentan ejercicios físicos— y qué fracción debe dirigirse a pacientes de alto riesgo, por ejemplo, recetas de estatinas para reducir el colesterol".
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