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La ciudad y la provincia de Buenos Aires concentran el 65 por ciento de los subsidios nacionales destinados a proyectos de investigación en ciencia y tecnología. La región más desfavorecida del país es la del nordeste, donde sólo llega el dos por ciento de los recursos.


De acuerdo con un artículo escrito por Javier Lorca en el diario argentino Página 12, esta situación se explica por la falta de recurso humano calificado en las regiones menos favorecidas.

En ciencias básicas es donde hay más desequilibrio, según Lino Barañao, presidente de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica: “Cuando se analiza la excelencia de los equipos y la capacidad para obtener resultados, los investigadores de las zonas más desfavorecidas no están en condiciones de competir”. 

El funcionario sugirió que lo ideal sería que la actividad regional la fomentaran los gobiernos provinciales y las universidades locales, y que hicieran énfasis en solucionar problemas regionales, en los que difícilmente encontrarán competidores más capacitados que ellos mismos.

Enlace con el artículo de Página 12