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[RIO DE JANEIRO] Después de las intensas protestas de representantes de la comunidad científica, el alcalde de Río de Janeiro, César Maia, decidió vetar integralmente la ley de protección de animales el pasado viernes 9 .

 

La versión de la ley inicialmente sancionada por Maia fue considerada por los científicos como muy amplia, al punto que  interrumpiría la experimentación en Río de Janeiro, ciudad que concentra 20 por ciento de la investigación de Brasil (ver Nueva ley ‘puede perjudicar’ investigación en Brasil).

En respuesta, de acuerdo con el diario O Globo, Maia dijo que había firmado la versión incorrecta de la ley, y que en la nueva versión los institutos de investigación no estarían incluidos en las penalidades.

Aún así, representantes de la comunidad científica alertaron que la ley prohibiría que las industrias experimenten con animales e impediría la realización de investigaciones conjuntas entre iniciativas privadas e institutos de investigación y universidades, actividad que es estimulada por la ley de innovación de Brasil.

Otro problema identificado por científicos en la ley es que el texto indicaba que los consejos de ética que regularían las investigaciones con animales deberían seguir normas internacionales, pues actualmente no existe una regla mundialmente aceptada.

"Si fuera efectivamente aprobada, esta ley traería serias restricciones a las investigaciones realizadas en Río de Janeiro", dijo a SciDev.Net Marcelo Morales, presidente de la Sociedad Brasileña de Biofísica y director de la Federación de las Sociedades de Biología Experimental. 

 

Morales afirmó que "al prohibir el uso de animales por las industrias, los recursos aprobados a partir de la ley de innovación no serían transferidos a los proyectos de investigación". 

 

Según Morales, solamente en el instituto donde él trabaja en la Universidad Federal de Río de Janeiro, al menos 40 laboratorios y 90 investigadores sufrirían serias restricciones de trabajo en caso que la ley fuera aprobada.

 

Los científicos brasileños quieren que sea promulgada una ley que defina, en el ámbito nacional, normas para el uso de animales en investigaciones. En particular, defienden la aprobación de una ley propuesta por el fallecido diputado Sergio Arouca, que está en estudio en la Cámara de Diputados desde 1995. 

 

En la propuesta de Arouca se planea crear el Consejo Nacional de Control de Experimentación Animal, y está previsto formar comisiones de ética en instituciones de investigación y restringir el número de animales que se usen con ese fin.