04/08/14

La educación no aprovecha oportunidades en la industria

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Crédito de la imagen: Suzanne Lee/Panos

De un vistazo

  • Potenciar la productividad laboral es esencial para cerrar la brecha de ingresos
  • Países en desarrollo poco invierten en habilidades técnicas para lograrlo
  • Pero China está allanando el camino, principalmente a través de la importación del conocimiento

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Países emergentes y en vía de desarrollo deberían enlazar educación y políticas tecnológicas para producir las habilidades técnicas que requieren para potenciar sus economías y “cerrar la brecha de ingresos con los países más desarrollados”, de acuerdo con un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Perspectivas sobre Desarrollo Mundial, 2014, publicado este mes en París, Francia, destaca un desajuste entre las habilidades que necesitan las economías de los países emergentes y en vía de desarrollo, y la formación que se les está ofreciendo.

Por ejemplo, indica que en una serie de países africanos los costos de labores industriales son altos en relación con la productividad de los trabajadores debido a la escasez de ingenieros capacitados.
A menos que la productividad laboral aumente, muchos países emergentes y en vía de desarrollo serán incapaces de cerrar la brecha de ingresos con economías avanzadas por muchas décadas más, advierte el informe.

“Muchos países en desarrollo invierten poco en las habilidades técnicas de nivel intermedio más necesarias para sus economías”, dice Martin Wermelinger, economista de la OCDE. “Los sistemas educativos en países en desarrollo deben ser flexibles de modo que puedan adaptarse rápidamente a las necesidades cambiantes de la economía”.

“Ha habido poca relación entre lo que estudian los alumnos, y lo que los países requieren”.

Phillip Griffiths, Grupo Iniciativa Científica

También deben promover la innovación, dice el informe. Al desarrollar productos y procesos nacionales, e importar el conocimiento global, los países en desarrollo podrían ganar ventajas competitivas.

El modelo chino

Entre los BRIICS –un grupo de seis economías nacionales emergentes (Brasil, Rusia, India, Indonesia, China y Sudáfrica) –, China ha sido el más sistemático en importar el conocimiento global a través de varios medios.

“La estrategia de China para potenciar la educación y las habilidades, coherente con su modernización tecnológica, puede ser vista como un modelo para otros países en desarrollo”, dice Wermelinger a SciDev.Net.

“China no solo ha estado aprovechando el conocimiento global a través de la importación de bienes primarios, [sino]  también enviando más estudiantes a universidades extranjeras que cualquier otra economía emergente”, dice. “Adoptar el conocimiento global a través de varios canales ha ayudado a China a moverse hacia sectores de mayor valor agregado”.

Pero Wermelinger nota que, al tiempo que los costos incrementan en China, incluyendo costos de labores, los trabajadores necesitarán más habilidades específicas para que el país se mueva hacia segmentos superiores de la economía.

Examinando las necesidades

El informe recomienda que los gobiernos utilicen estudios para identificar y evaluar las habilidades necesarias para sus economías.

Una vez identificadas las habilidades, los países en desarrollo pueden asignar fondos públicos consecuentemente hacia la educación superior y la formación vocacional. El sector privado desempeña un importante papel al interactuar con instituciones educativas para ayudar a identificar los programas de estudio, dice el informe.

“Países que han sido de ingresos medios por varias décadas, como Brasil, México y Sudáfrica luchan todavía para proveer una educación básica de alta calidad para todos. El problema es aún mayor cuando se miran las ofertas de habilidades técnicas de nivel medio más específicas”, acota Wermelinger.

La educación podría ser más efectiva si los profesores tuvieran una mejor capacitación, reconocimiento social e incentivos más fuertes, como mejores salarios y pensiones, afirma el informe.

Además, el documento indica que los países en desarrollo deberían también incrementar la inversión en investigación y desarrollo (I+D) para impulsar sus capacidades de innovación, lo cual les permitirá aprovechar los conocimientos y la tecnología global existente. El promedio de inversión de los países en desarrollo es menor del uno por ciento del PIB (Producto Interno Bruto) en I+D, comparado con el promedio de la OCDE de 2.4% del PIB.

Phillip Griffiths, presidente del Grupo Iniciativa Científica, dedicado a fomentar la ciencia en países en desarrollo, dice que “una barrera al desarrollar habilidades técnicas que requieren los países africanos ha sido el anticuado modelo de la educación basado en la disciplina que prevaleció por muchos años después del cierre de la época colonial.

“Ha habido, hasta hace poco, poca relación entre lo que estudian los alumnos, y lo que los países requieren, como científicos, ingenieros y técnicos capacitados que puedan contribuir al crecimiento económico”, indica a SciDev.Net.

Pero Griffiths agrega que algunas instituciones se están percatando ahora de la necesidad de estrategias educativas que estén mejor alineadas con las necesidades económicas. Asimismo, que el sector privado tiene la responsabilidad de comunicar con mayor claridad y fuerza el conocimiento y las habilidades que requiere.

Enlace al informe completo

Vea el gráfico Productividad laboral en economías emergentes y en vía de desarrollo detrás de las economías avanzadas de la OCDE, para consultar la productividad laboral en su país y compárela:

Este gráfico presenta el número de personas en empleos formales y su productividad promedio (PIB generado por cada persona empleada), para 165 economías. El área por cada economía representa su PIB total.

Mueva su ratón sobre la tabla para acceder a definiciones detalladas y valores individuales por país.

La versión original de este artículo se publicó en la edición global de SciDev.Net