26/11/10

Firme progreso de bibliotecas digitales en Latinoamérica

Brasil, Uruguay, Chile, Colombia y Ecuador son algunos de los países que tienen bibliotecas electrónicas en América Latina Crédito de la imagen: Anonymus Account / Flickr

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[MONTEVIDEO] Las bibliotecas electrónicas en América Latina —que permiten a universidades y centros de investigación acceder gratuitamente o a bajo costo a revistas y libros científicos internacionales— experimentan un crecimiento sostenido en la cantidad de usuarios y títulos.

En la región hay experiencias en Brasil, Uruguay, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela, entre otros, la mayoría impulsadas, financiadas y administradas por el Estado. 

“En América Latina, las bibliotecas electrónicas son una solución para reducir brechas y asimetrías en el acceso a información científica y tecnológica y deben ser vistas como un insumo esencial para asegurar cambios sustentables en el país”, dijo a SciDev.Net Soledad Bravo, secretaria ejecutiva de la corporación Cincel, que administra la biblioteca digital chilena. 

“El Estado debe velar por el acceso de la comunidad a la información científica si de verdad está comprometido con el tránsito hacia la sociedad del conocimiento”, agregó Bravo.
 
La iniciativa pionera en la región es el Portal de Periódicos de Brasil. Desde su creación en 2000 hasta este año, pasó de ofrecer 1.800 títulos a 24.000, y de 72 instituciones usuarias aumentó a 311 en el mismo período. 

Según una investigación publicada este mes en la Revista Brasilera de Postgraduación, la evolución en el número de usuarios también se refleja en las descargas realizadas, que pasaron de tres millones en 2001 a 65 millones en 2009. 

En Argentina, la Biblioteca Electrónica de Ciencia y Tecnología se creó en 2003 y ofrece servicios a 57 universidades, instituciones políticas y de investigación. Las descargas pasaron de 500.000 en 2003 a tres millones en 2009. 

La biblioteca digital “permite que los investigadores accedan desde cualquier punto del país”, lo que da equidad geográfica en naciones de gran extensión como Argentina, señaló a SciDev.Net Silvia Nakano, directora de la biblioteca. 

En Chile, desde 2007, la Biblioteca Electrónica de Información Científica (BEIC) permite a universidades e instituciones de investigación acceder a más de 5.000 títulos de revistas científicas internacionales. 

Desde su apertura y hasta septiembre de 2010, los usuarios descargaron más de seis millones de artículos. 

En Uruguay, el programa Timbó ofrece desde 2009 unos 16.000 títulos de texto completo a 28 universidades públicas y privadas, centros de investigación, ministerios y direcciones nacionales. 

En su corta experiencia, “la comunidad científica uruguaya expresó un gran entusiasmo con el portal, que se refleja en las tasas de descarga de artículos”, dijo a SciDev.Net Nicolás Caitán, coordinador del portal uruguayo. 

En menos de dos años, los investigadores uruguayos descargaron más de 280.000 textos. 

Acceder a bibliotecas electrónicas “no es un costo indirecto de los proyectos de investigación que deba ser solventado por cada investigador, sino que forma parte de las infraestructuras básicas para hacer ciencia, al igual que un microscopio”, concluyó Bravo.

Enlace a la investigación publicada en la revista Revista Brasilera de Postgraduación