02/11/12

Prospección: creando el futuro de la seguridad alimentaria

Para 2050, el mundo necesitará producir 70 por ciento más alimentos que hoy Crédito de la imagen: Flickr/ siebe

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La seguridad alimentaria mundial depende de la calidad de los estudios agrícolas prospectivos que hoy desarrollamos, dice Mark Holderness.

El cambio climático, el crecimiento de la población y las demandas que compiten por la tierra y los recursos están poniendo gran presión sobre los sistemas alimentarios del mundo.

Los pequeños agricultores del mundo en desarrollo, que producen muchos de los alimentos para los más pobres, están amenazados por sequías e inundaciones devastadoras, alzas en los precios de los alimentos y la pobreza persistente.

Los avances científicos han aliviado mucho el hambre y la pobreza. La introducción de variedades de cultivos de alto rendimiento y las mejores prácticas de manejo agrícola han salvado y mejorado millones de vidas.

Pero el ritmo de cambio se está acelerando, demandando mayores respuestas y más urgentes. Nuestra población alcanzará nueve mil millones en 2050. Para alimentarla necesitaremos producir 70 por ciento más alimentos, y hacerlo sin destruir nuestro ambiente.

No podemos responder solo cuando la crisis esté sobre nosotros. Nuestras acciones deben mirar hacia adelante, llegando más allá de las demandas a corto plazo, hacia los impactos a largo plazo.

¿Qué tipo de mundo veremos en las próximas décadas? ¿Y qué tipo de mundo queremos ver en los próximos 20, 40 o 60 años?

Preguntas para los expertos

Estas son las preguntas que debemos hacer, y que abordaron cientos de organizaciones y expertos en desarrollo agrícola durante la Segunda Conferencia Mundial sobre Investigación Agrícola para el Desarrollo (GCARD2), que se realizó en Punta del Este, Uruguay, esta semana (29 de octubre al 1 de noviembre).

En la agenda: una revisión de los pros y contras para el mañana a partir de las decisiones hechas hoy que afectarán los sistemas alimentarios para nuestro futuro. ¿Qué cambios deben ocurrir, no sólo en la práctica y la política, sino también en los comportamientos y las actitudes, para asegurar que el futuro sea sostenible y brinde sustento para los pequeños productores?

Los participantes del GCARD2 conocieron varios hallazgos derivados de más de 40 estudios ‘prospectivos’ para considerar futuros escenarios y variables clave que podrían ayudar y obstaculizar el camino para la seguridad alimentaria en regiones en desarrollo y a nivel mundial.

Para ser clasificado como estudio prospectivo, la investigación debe tener menos de cinco años, y mirar por lo menos hacia los siguientes 10 años.

Por ejemplo, el informe del Programa de Investigación en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS, por su sigla en inglés) del CGIAR explora escenarios regionales futuros en África del Este. Los representantes gubernamentales, la sociedad civil, el sector privado y los investigadores colaboraron para identificar qué factores serán los que más influyan en la seguridad alimentaria, los ambientes y los medios de vida en 2030 y 2050.

Los factores de riesgo incluyen los estados políticos fragmentados y si la región asume una actitud activa o reactiva frente a la seguridad alimentaria, el ambiente y el sustento, mostrando precisamente adónde debe apuntar el trabajo.

Cómo funciona la prospección

La prospección reduce la incertidumbre y aumenta nuestra visión a largo plazo. El análisis construye potenciales escenarios futuros basados en simulaciones del tipo ‘qué pasaría si’, que reflejan los resultados de diferentes enfoques y decisiones tomadas.

Los estudios también recolectan los mejores datos disponibles sobre tendencias como el cambio, la demografía, la urbanización y la demanda de los consumidores, y analizan las ventajas y desventajas, por ejemplo, en el uso de la tierra, las inversiones y las prioridades de las políticas.

[Los estudios prospectivos] diseñan rumbos alternativos: políticas activas versus reactivas, enfoques colectivos versus aislacionistas, necesidades de desarrollo versus seguridad alimentaria, entre otros.

Este tipo de análisis identifica los factores que pueden llevar al fracaso. También identifica los futuros escenarios que queremos ver, y rastrea las decisiones, las inversiones y las colaboraciones necesarias para alcanzarlos.

La prospección incorpora datos cualitativos y las opiniones de múltiples partes interesadas. Los escenarios prospectivos más robustos son aquellos que integran los aportes de analistas en investigación con los de los agricultores, la sociedad civil, los tomadores de decisiones y otros que afectan y son afectados por las elecciones del desarrollo agrícola.

De los resultados de los estudios prospectivos analizados por el GCARD2, podemos anticipar que los principales impulsores de la producción de alimentos serán las políticas, las relaciones de poder, las instituciones, las fuerzas económicas y el cambio climático. Está claro que si no aseguramos hoy que las voces de las partes interesadas sean incluidas en el establecimiento de prioridades y en la traducción de los planes en acciones, algunos quedarán atrás.

Dando forma al futuro

El GCARD es un foro único para encontrarse cara cara y para integrar puntos de vista de diversas partes interesadas, incluyendo los pequeños agricultores.

Hemos llegado a todos, desde los investigadores agrícolas jóvenes hasta los principales líderes políticos, y desde las organizaciones locales hasta las mundiales. El objetivo no es generar una respuesta universalmente aplicable, sino construir una mejor comprensión de las implicancias de las diferentes opciones agrícolas para un amplio espectro de sectores.

Los desafíos que enfrentamos para el desarrollo agrícola, para nuestra seguridad alimentaria mundial, y para la salud de nuestro planeta son difíciles y complejos, y tienen el potencial de cambiar dramáticamente en el futuro. No podemos permitirnos el limitarnos para hacer frente a las cuestiones que ya existen. Debemos actuar ahora y alinear las discusiones de financiamiento y de políticas con las cuestiones futuras.

Es importante que las decisiones de financiamiento sean sostenibles para facilitar la investigación a largo plazo que creará un futuro con seguridad alimentaria.

Es imposible predecir qué pasará a largo plazo. Pero es posible modelar qué podría ocurrir. Y con el uso sensato e inclusivo de la información podemos dar forma al futuro que queremos ver: uno donde los medios de vida mejoren y la seguridad alimentaria y la sostenibilidad de nuestro planeta prevalezcan.

Mark Holderness es secretario ejecutivo del Foro Mundial sobre Investigación Agrícola (GFAR).

Lea el blog de SciDev.Net desde la conferencia GCARD2